jueves, 20 de junio de 2013

COMPANION FROM HELL

"COMPANION FROM HELL" es un libro que contiene material de Alan Moore y Eddie Campbell, aunque está conducido por el segundo. En él, se incluye una buena parte de los guiones remitidos por Moore para la obra "From Hell" acompañados de la página terminada para comparar; también se han escogido los momentos más importantes a juicio del dibujante, se comentan aspectos básicos de la realización gráfica a lo largo de todos los años que se extendió e incluso curiosidades al respecto. En todo momento cada capítulo se completa con extractos de entrevistas y citas interesantes sobre el tema. En definitiva, si los acontecimientos sobre Jack el Destripador contados de la forma que hicieron ellos ya supuso una forma de abordar la narración novedosa, este trabajo vuelve a poner la guinda al pastel. 

Precisamente, ya en los Apéndices de la obra decía Moore: "Baste decir que cualquier apéndice adecuado que listara las referencias de Eddie del mismo modo que yo estoy listando las mías sería el doble de largo que la presente monstruosidad." Y por otra parte, Campbell describe el presente trabajo de la siguiente forma: "Companion no habla sólo de la historia de ficción, sino también de lo que rodeó su planificación y su publicación."

Destacamos que este manual que se ha conformado requiere una lectura o relectura reciente de From Hell, pues su estructura se vertebra prácticamente en el orden de los acontecimientos descritos en ella; en ese caso, es un gozo conocer tantos detalles de trabajo, o en cuanto a lo que acontecía mientras en las vidas de ambos (haciendo una página de From Hell, Moore decide hacerse mago), e incluso los altibajos en las relaciones que conllevaba la realización de la obra.
Atendiendo los avatares que se nos relatan, observamos que la investigación y las descripciones de Alan Moore fueron prolijas, no cabe duda; según se nos va describiendo en estas páginas, en la realización de From Hell hubo momentos de disputa entre guionista y dibujante, porque el primero describía con un detalle que no se corresponde ni con el estilo de dibujo, ni siquiera con la edición, que era en blanco y negro (en muchos momentos se habla de colores). Campbell alega que se requería una "agudeza visual" mayor de la que se podía poseer en esa perspectiva, ese encuadre, en su caso y puede que para el de otro dibujante que detallara más. Nos damos cuenta que en las páginas terminadas del cómic no se aprecia todo lo que había detrás, y sin embargo con la oportunidad de este libro estamos asistiendo a ver la obra desde otra perspectiva, la del que ilustra las viñetas. No sólo nos muestran variaciones respecto a las ediciones, o soluciones diferentes que podría haber ofrecido, sino que en bastantes ocasiones Campbell, que investigaba por su parte, complementó con detalles importantes (como las citas de la época que aparecen en las hojas del calendario, entre otras cosas) o corrigió algún dato histórico que Moore había errado (cítese el asunto del puente que cruzan Gull y Netley en su viaje por Londres). Es por tanto manifiesto que se perdieron cosas que estaban en la mente del escritor, pero el resultado final nos trajo todo el esmero que pudo aportar el artista, sin el cual probablemente nunca hubiéramos conocido esta maravilla.

Me ha sorprendido la estrecha colaboración con las editoriales que sigue Campbell en From Hell y en el resto de sus trabajos sobre la técnica de reproducción. Su objetivo es saber de qué dispone y que el resultado final se adapte a la calidad final, y eso no es algo que se vea habitualmente, cuando encontramos libros de pésima calidad visual o material.  Un acto de honestidad comparable al reconocimiento de que emplea asistentes en su trabajo gráfico (algo no siempre público en el caso de otros de sus compañeros del gremio), citando sus nombres: Steve Stamatiadis, Pete Mullins o April Post, además de su mujer, que borra el lápiz cuando entinta (por lo tanto, con esto descubrimos que no conserva el lápiz original). Ello explicaría los cambios a un estilo más frío y técnico de los fondos por ejemplo en el capítulo en que William Gull va describiendo Londres en relación a su teoría sobre la masculinidad y la feminidad.
Hablando de  los lugares donde se cometieron los asesinatos de 1888, visualizamos fotografías de la jornada que Alan Moore llevó a cabo por Londres en compañía de Steve Moore y Jamie Delano. Todo ese material fue aportado junto con los guiones, aparte de otras referencias desentrañadas por Campbell. La base de la investigación es tan sólida como parecía, no cabe duda.

Comentarios, sobre los personajes, pinturas, portadas, la película,... todo aficionado a From Hell se deleitará con Companion. Ahora bien, este libro no es sólo una galería de extras; contamos con la relevancia de los guiones, obviamente, pero nos damos cuenta que el interés destaca aún más con los hallazgos de Gary Spencer Millidge, que en su investigación para el libro "Alan Moore Storyteller" consiguió las miniaturas que Moore realizó antes de escribir cada página de su guión. Colocadas conjuntamente con las páginas de Campbell se puede ver la diferencia en la solución adoptada, que a veces no es mucha gracias a las cuidadas descripciones de Moore; en otros casos incluso se mejora el enfoque planteado en el boceto. Interés completado por la comparativa realizada entre el trabajo final y una sinopsis de 1994 que Moore envió para hacer la película (en ese año aún no se había completado la realización de From Hell), y hay diferencias a veces importantes que nos dejan bien claro que esta no es la solución definitiva al caso del Destripador, sino sólo una bien documentada obra de ficción, como en todo caso manifiestan sus autores.
Por último, señalar que sin duda coincidimos con la afirmación que se vierte aquí de que la primera edición de From Hell en la colección Trazado de Planeta (con la foto de Gull y las pastas en negro) es sin duda la mejor realizada hasta la fecha. Aparte de ello, recomendamos esta edición de Companion From Hell, que no es la única (en el mercado anglosajón la publican Top Shelf y Knockabout) aunque una vez leída sí hemos de rendirnos ante ella y asegurar que presenta unas condiciones de lujo. Para todos los enamorados de From Hell, claro.