Por diversos problemas de los autores (Alan Moore y Kevin O’Neill) con las editoriales, el Volumen III de la Liga de los Caballeros Extraordinarios ha visto pospuesta su publicación en unos años. Hoy, por fin, llegará a nuestras manos gracias a que se ha podido llegar a un acuerdo con TOP SHELF PRODUCTIONS, compañía al margen del mainstream, como solicitaba el mago de Northampton.
Este tercer volumen se estructura en tres publicaciones autoconclusivas: "1910", "1968" y "2008". La primera que llega a nuestras librerías en España será la Liga de 1910, el próximo mes de mayo y como parte del catálogo de novedades para el Salón del Cómic de Barcelona. De la mano de Planeta de Agostini, en un tomo de 80 páginas y al razonable precio de 4,95 €, esperemos que la espera haya valido la pena.
Al margen de la tercera parte de la Liga, aún nos queda en el camino el especial de 2007 Black Dossier, realizado por obligaciones contractuales con Wildstorm (o lo que es lo mismo, DC). Veremos si el cabreo del barbudo no merma la calidad de estos últimos trabajos, que si bien no son sus obras capitales, hasta ahora han resultado entretenidas. Quizás su deambular errante por otros campos como la literatura o la magia le hagan reflexionar y darse cuenta que si ha de tragarse su orgullo y seguir currando con quien ya no le cae bien para comer, al menos puede hacerlo dignamente y disfrutando del trabajo en sí. Y de paso nos da el gusto nosotros.
Este tercer volumen se estructura en tres publicaciones autoconclusivas: "1910", "1968" y "2008". La primera que llega a nuestras librerías en España será la Liga de 1910, el próximo mes de mayo y como parte del catálogo de novedades para el Salón del Cómic de Barcelona. De la mano de Planeta de Agostini, en un tomo de 80 páginas y al razonable precio de 4,95 €, esperemos que la espera haya valido la pena.
Al margen de la tercera parte de la Liga, aún nos queda en el camino el especial de 2007 Black Dossier, realizado por obligaciones contractuales con Wildstorm (o lo que es lo mismo, DC). Veremos si el cabreo del barbudo no merma la calidad de estos últimos trabajos, que si bien no son sus obras capitales, hasta ahora han resultado entretenidas. Quizás su deambular errante por otros campos como la literatura o la magia le hagan reflexionar y darse cuenta que si ha de tragarse su orgullo y seguir currando con quien ya no le cae bien para comer, al menos puede hacerlo dignamente y disfrutando del trabajo en sí. Y de paso nos da el gusto nosotros.
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